Ángela Mengíbar
Artista Plástica
En muchas ocasiones, instantáneas propias sirven de pistoletazos a obras de madera y lienzos pintados con óleos y acrílicos que tratan de atrapar momentos fugaces del recuerdo feliz.
Todas las líneas de acción trabajan en favor de una convergencia en la espiral de recuerdos, momentos de sosiego, sencillez y alegría que la vida en el Sur ha regalado.
Todas actúan como un ámbar, una parafina amable, caniculosa que permite revivir ad infinitum la tibieza de arena, la fresca brisa, la visión nublada por el vapor de verano que, en mi visión, me envuelve todo el año: en el árido asfalto y el gélido invierno de un cielo sin mar.
Amelia Meléndez y Ángela Mengíbar (al alimón)
obra textil
A través del hilo el papel y el metacrilato pongo en valor los recuerdos y las huellas. El papel simboliza las memorias no escritas de aquellas mujeres.
La dicotomía entre Arte versus Artesanía se expresa en el trabajo con un hilo que connota los bordados de las mujeres de mi infancia, auténticas obra de arte pese a su finalidad de uso doméstico.
Las tardes de verano en la periferia de una mesa camilla eran el balcón de las abuelas y su labor minuciosa y paciente tras haber finiquitado las labores del campo.
La obra 'non finita' con nudos y errores tributa a la "perfección" de las mujeres de nuestras familias. Abuelas supervisoras de madres supervisoras de hijas supervisoras de nietas y sobrinas… penélopes que deshacían con amor la trama errada para dejar espacio al tejido correcto, impartiendo así lecciones continuadas de paciencia sin cuento.
En una caja de metacrilato o marcos de cristal transparente y límpido como recuerdos juveniles, en níveas o translúcidas peanas convertimos también en Arte las piezas.
Amelia Meléndez y Ángela Mengíbar (al alimón)
obra gráfica
Fecha: 2024
Técnica: litografía
Soporte: Papel Conqueror Connoisseur blanco 300 gr.
Dimensiones: 35 x 50 cm (24 x 34 cm mancha)
35 x 42 cm (25 x 31 cm mancha)
De cada edición:
90 ejemplares
P/A: X
B.A.T.: 1
H.C.: X
Editor: Taller del Prado